"No nos enojemos en el camino unos contra otros. Caminemos con nuestros hermanos y compañeros con dulzura, paz y Amor; y lo digo con toda claridad y sin excepción alguna: no te enojes jamás, y si es posible; por ningún pretexto des a tu corazón entrada al enojo… Las personas a quienes naturalmente nos sentimos poco inclinados, han de ser cabalmente, y con frecuencia, el objeto de nuestra dulzura y caridad"
(S. Francisco de Sales).
No hay comentarios:
Publicar un comentario