“Más indecencia e impureza lleva el alma para ir a Dios,
si lleva en sí el menor apetito de cosa del mundo,
que si fuese cargado de todas las feas y molestas tentaciones y tinieblas que se pueden decir,
con tal que su voluntad racional no las quiera admitir”.
(S. Juan de la Cruz, Dichos de luz y amor)
No hay comentarios:
Publicar un comentario